Los expertos en arqueología mencionaron que este mamut era bastante pequeño, sólo medía unos 2,7 metros de altura y parecía ser una hembra.
En particular, su skᴜɩɩ todavía es bastante claro, sus costillas y su mandíbula inferior están relativamente intactas, con solo unos pocos huesos de las piernas faltantes.
El Sr. McEwen, jefe de familia de Texas, dijo: “Mi sobrino Ethan Beasley y yo usamos una excavadora para excavar tierra en el terreno comercial de la familia. Después de tocar accidentalmente su colmillo, de aproximadamente 1,8 metros de largo, avisamos inmediatamente a los paleontólogos.
Con la sensación de lo desconocido corriendo por sus venas y un confiable detector de metales en la mano, un experto se embarca en un viaje que cambiará sus vidas para siempre.
El esqueleto fósil está actualmente donado al Museo Perot, en Texas. Esta cotribución es extremadamente importante para la arqueología.
De lo contrario, este fósil biológico podría convertirse en un objeto de acción y los científicos no podrían describirlo ni estudiarlo más a fondo.
Con cada pitido de medición y la creciente intensidad de la apticιpaTioп, el detector revela profundamente un secreto escondido debajo de la superficie de la tierra.
Con el aliento inflado, ven una vista fascinante: una majestuosa casa dorada, que pesa teps de kilogramos y flota en la luz.