Las despedidas de soltero son una forma divertida de celebrar el fin de la soltería y el comienzo de la vida matrimonial. Algunas personas se descontrolan por completo en Las Vegas, mientras que otras disfrutan de una celebración tranquila con solo unos pocos amigos: hay una gran cantidad de formas de tener ese último “hurra”. Mitch White planeó tener un relajante viaje en canoa con sus mejores amigos. El novio no tenía ni idea de que este viaje se convertiría en una misión de rescate para un perro anciano atrapado en el barro. Esa es una despedida de soltero que seguramente no olvidará.
No todos los días una despedida de soltero se convierte en una misión de rescate para un perro.
Un hermoso día, Mitch, un joven novio, reunió a sus amigos más cercanos y se embarcó en un viaje en canoa para celebrar su próximo matrimonio. Esta despedida de soltero debía ser todo sobre la naturaleza y el compañerismo. ¿Y hay una mejor manera de unirse que rescatando a un cachorro juntos?
Justo después de que el grupo almorzara y continuara con su viaje, el sobrino de Mitch, Gaylen Fraenkel, escuchó ladridos tristes. No habían encontrado a nadie, por lo que era muy poco probable que fuera el perro de algún campista. El joven decidió dar la vuelta a la canoa para asegurarse de que todo estuviera bien. Y menos mal que lo hizo: un perro desesperado estaba atrapado en el espeso barro y estaba usando sus últimos restos de fuerza para pedir ayuda.
Al acercarse a la orilla, vieron a un perro pidiendo ayuda, completamente atrapado en el barro.
Los chicos rápidamente saltaron y comenzaron a excavar, usando remos como palas.
Para mantener al perro cómodo, le ofrecieron agua, de la cual bebió medio galón antes de detenerse. Los chicos compartieron su almuerzo con él, dándole un poco de carne y salchichas. Este pequeño tentempié estaba destinado a darle un impulso de energía para levantarse. Los solteros lo llamaron Wilson e intentaron llamarlo por su nuevo nombre en un intento de hacerlo levantar, pero estaba demasiado cansado, incluso después de las deliciosas salchichas.
El grupo decidió no acercarse demasiado a Wilson ya que no vieron ningún collar y no estaban seguros de si era amigable. Eso es una buena práctica cuando se trata con un perro que no conoces.
Alex, uno de los amigos de Mitch, decidió que era hora de pedir ayuda y marcó el 911. Explicó la situación y despacharon al Departamento de Bomberos de Carver, que acudió en ayuda de Wilson en 20 minutos. Trajeron un arnés que pudieron colocar debajo de su pecho y los bomberos, junto con dos de los amigos de Mitch, sacaron a Wilson de su prisión fangosa. ¡Hurra!
Gracias a la amabilidad de los solteros y la ayuda del departamento de bomberos local, el adorable perro fue rescatado.
Después de un exitoso rescate, Wilson tuvo otra sorpresa agradable. Cinco minutos después de sacarlo del barro, apareció su dueño. Se sorprendió al ver a su amigo de cuatro patas todo cubierto de barro. “¡Ed! ¿Qué estás haciendo ahí abajo en el barro?” exclamó al ver a su perro. Así es como Mitch y sus amigos descubrieron que habían estado llamando a Ed con el nombre equivocado. Aunque para mí se parece a un Wilson.
Hace unos días, Mitch recibió una sorpresa agradable cuando un amigo de los propietarios se puso en contacto con él. Quería hacerle saber a los salvadores de Ed que estaba mucho mejor, se estaba recuperando bien y ya estaba moviéndose por su cuenta. Apuesto a que sus dueños no lo dejarán fuera de su vista ahora.
El adorable Ed claramente nació bajo una estrella afortunada. La fiesta de Mitch lo encontró justo a tiempo para llevarlo a un lugar seguro. Pero, ¿qué pasaría si no lo hubieran encontrado?
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